Este fin de semana, después de estar varios fuera, por fin, nos hemos quedado en casa y me apetecía cocinar algo. Al final no me compliqué mucho la vida e hice una receta fácil. Las magdalenas son un gran postre o dulce y son muy agradecidas. Es muy difícil que salgan mal. Hace poco en el supermercado iba a comprar harina y vi una que hacía años que no la veía. Es la harina flor. Recuerdo cuando era más pequeño hacer los bizcochos con esta harina y quedaban muy esponjosos. Así que la compré y he hecho las magdalenas con ella. Es muy práctica porque ya tiene la levadura añadida y no tienes que preocuparte de qué cantidad poner.
Ingredientes: (salen unas 24 unidades)
- 3 huevos
- 250 g. leche entera
- 175 g. aceite de girasol
- 200 g. azúcar
- 50 g. azúcar invertido
- 375 g. harina flor
- Ralladura de 1 limón
- Batimos los huevos y les añadimos la leche y el aceite. Mezclamos bien.
- Añadimos el azúcar, el azúcar invertido y la ralladura del limón y batimos hasta que el azúcar se haya mezclado por completo.
- Por último vamos añadiendo la harina tamizada poco a poco removiendo entre vez y vez para que se integre completamente y no queden grumos.
- Dejamos reposar la masa media hora.
- Precalentamos el horno a 200ºC
- En un molde de silicona para magdalenas o muffins introducimos papeles para magdalenas. Los rellenamos hasta 2/3 y si queremos podemos poner un poco de azúcar por encima.
- Metemos al horno y las dejamos durante 15-20 minutos hasta que estén doraditas. Podemos introducir un pincho para saber si están hechas.
- He hecho algunas magdalenas con dulce de leche. Para ello ponemos un poco de masa en el papel, a continuación un cucharadita de dulce de leche y encima completamos con la masa. Quedan muy buenas de sabor pero el dulce de leche se va a la parte de abajo.
- También hice unas mini magdalenas con unos moldes de bombones que tengo.
- Una vez hechas las sacamos del molde y las dejamos enfriar en una rejilla.